Publicado en El Socialista Digital
El PAN ha pasado de ser un gran desconocido a la esperanza de los partidos animalistas en Europa. La formación portuguesa – cuyas siglas significan Pessoas, Animais, Natureza– representa mucho más que un programa animalista. Apuestan por la dignidad de los ciudadanos, la economía sostenible para todas y todos y por el fin de la violencia contra otros. Incluida la Naturaleza. Unos ideales que apoyaron el pasado domingo más de 74.000 personas en las elecciones generales de Portugal. Con estos resultados, el PAN ha logrado algo histórico: tener un diputado en la Asamblea de la República.
Ese diputado será su candidato por Lisboa y portavoz, André Silva. Un hombre que nació justamente el día en que se aprobó la Constitución lusa. Ingeniero civil que pronto tomó conciencia política y en relación a los derechos animales, y que ha logrado meter al PAN en la Cámara sólo tres años después de ingresar en el partido. La esperanza de muchos, no sólo portugueses, que ven en sus propuestas la vía animalista del resto de Europa. Propuestas que son compartidas por otros partidos de cambio portugueses como la reforma de la Ley Electoral; otros compartidos por partidos ecologistas, de izquierda y animalistas de toda Europa como la eliminación de corridas y espectáculos con toros; o otras muy relacionadas con los pasos que la propia Unión Europea está tomando como fomentar las alternativas a la experimentación animal.