
Artículo publicado en El Caballo de Nietzsche
Crean una web para denunciar casos de perros permanentemente encadenados
Su vida se desarrolla en un pequeño espacio. Aunque alrededor tienen mucho patio o incluso hectáreas de campo, solo se pueden mover entre tres o cuatro metros en cada sentido. En ese espacio tienen (cuando lo tienen) su cuenco de agua, su comedero, su lecho y el lugar donde se ven obligados a hacer sus necesidades. Están atados con una cadena al cuello durante 24 horas. Esta es la vida de Lúa, Pancho o Pirri. Perros y perras que, aunque tienen familia, no tienen un hogar. Se trata de una práctica común, sobre todo en el mundo rural, donde algunas personas piensan que esa es su “utilidad”: vigilar una finca, advertir de los extraños o simplemente estar en el patio.
“Queremos visibilizar que eso es maltrato contra los animales, que es un hecho denunciable y que como sociedad debemos rechazarlo”, explica Rubén Pérez, portavoz en Galicia de Libera!, organización que junto a la Fundación Franz Weber ha puesto en marcha la campaña ‘ Sen Cadeas’ (Sin Cadenas). Se trata de una web donde cualquiera que vea esta situación puede contarlo, indicando el lugar exacto, añadiendo fotos y dando el mayor número de detalles. Aunque Libera! pide los datos del denunciante, se trata solo de una medida para evitar falsos avisos y nunca se trasmitirán a terceros. Algunos acabarán en denuncia formal ante los tribunales y otros, en un aviso por carta al propietario legal con consejos para que mejore la situación y calidad de vida de su perro, pero todos se reflejarán en el mapa de la vergüenza y los malos tratos de la web.
Sigue leyendo “Cadenas permanentes, jaulas invisibles” →