Susana Rodríguez, atleta galega, acaba de proclamarse hoy campeona mundial de triatlón en su categoría. Pero no será recibida entre multitudes a su vuelta de Nueva Zelanda, ni abrirá telediarios, ni tendrá un tour por la ciudad subida a uno de esos autobuses de dos plantas. Y no lo será por varias razones: por dedicarse a un deporte minoritario; por pertenecer al equipo femenino; y por ser paraolímpica.
Sí, Susana no ve. Es invidente. Compite en tres deportes en uno y lo hace con una guía, la también atleta Mayalen Noriega. Un esfuerzo que realiza en la competición (compatibilizando horarios, buscando entrenadores, clubs, financiación y fuera de las pistas. Después de haberse licenciado en Fisioterapia, está en segundo curso de Medicina. Este sí que es un ejemplo y una buena candidata para el Premio Príncipe de Asturias.
Mi artículo sobre la gesta de Susana Rodríguez en Agareso.